En una ubicación privilegiada a pocos pasos de la playa de Port Bo, esta propiedad única ofrece la oportunidad de adquirir un inmueble completo de tres plantas más sótano, con terrazas y vistas al mar. Una propuesta con carácter, versatilidad y un enorme potencial, en uno de los pueblos más auténticos de la Costa Brava.
La propiedad se sitúa en el corazón del casco antiguo de Calella de Palafrugell, en una tranquila calle a escasos metros del mar. Desde sus terrazas se disfrutan vistas despejadas al Mediterráneo y al pintoresco entorno urbano de este antiguo pueblo de pescadores. Restaurantes, comercios, servicios y transporte están todos accesibles a pie, lo que permite vivir con comodidad sin necesidad de coche.
El inmueble se distribuye en tres niveles más sótano. En la planta baja, actualmente se encuentra un local comercial con entrada independiente desde la calle, ideal para mantener como negocio, reconvertir en garaje o transformarlo en estudio u otra estancia según necesidades. En el sótano, una sala fresca y espaciosa resulta perfecta como bodega o zona de almacenamiento.
La primera planta está dedicada a la zona de noche. Dispone de cuatro dormitorios (dos dobles y dos individuales), todos exteriores y luminosos, además de dos baños completos. La suite principal destaca por su amplitud, buena ventilación y luz natural.
La segunda planta acoge la zona de día, con un espacioso salón-comedor de 30 m² con chimenea, grandes ventanales y acceso a una terraza orientada al sur con vistas al mar. En este nivel se encuentra también la cocina independiente, un lavadero separado y un aseo de cortesía.
El tercer nivel está ocupado por una espectacular terraza-solárium privada de 19 m², orientada al sur, con vistas abiertas al mar, la playa de Port Bo y los tejados blancos del casco antiguo. Un espacio único para disfrutar al aire libre durante todo el año.
El inmueble se encuentra en buen estado de conservación y presenta elementos tradicionales como carpintería de madera con doble acristalamiento, suelos de gres y chimenea. Cuenta con armarios empotrados, lavadero independiente y espacios bien ventilados. Una base sólida que ofrece muchas posibilidades de actualización y personalización.
Con un total de 321 m² construidos sobre una parcela de 81 m², esta propiedad es ideal tanto para uso residencial como para combinar vivienda y espacio profesional o creativo. Una oportunidad singular de vivir junto al mar en uno de los lugares más emblemáticos de la Costa Brava, con el valor añadido de poseer un inmueble completo, versátil y con carácter.