Ubicada en el corazón del histórico pueblo de Corçà, en el Baix Empordà, esta casa de piedra de tres plantas ofrece una oportunidad única para quienes buscan un proyecto de rehabilitación con gran potencial. Con una superficie construida de 450 m² y un terreno de 533 m², la propiedad combina la autenticidad de su estructura original con la posibilidad de transformarse en una vivienda moderna y acogedora.
El exterior de la casa mantiene el carácter rústico y encantador de su construcción original, con una fachada de piedra que evoca la historia y la tradición del lugar. En la parte posterior, un amplio patio-jardín proporciona un espacio soleado y tranquilo, ideal para crear una zona de ocio al aire libre con barbacoa, perfecto para disfrutar del clima mediterráneo.
El interior de la vivienda, aunque en parte habitable, requiere de una reforma integral para adaptarse a los estándares de confort modernos. Las distintas estancias mantienen detalles arquitectónicos de la época, como paredes de piedra, techos abovedados y vigas de madera, que podrían ser restaurados para preservar el carácter único de la casa. Los suelos de toba catalana y las ventanas con marcos de madera añaden un toque rústico que podría integrarse en un diseño renovado.
La distribución actual incluye tres dormitorios, un baño, un salón comedor, una cocina con chimenea y varias dependencias más, todas con necesidad de una actualización completa que permitirá rediseñar los espacios según las necesidades y gustos del nuevo propietario. El tercer piso, actualmente utilizado como almacén, ofrece la posibilidad de crear una zona de trabajo o estudio con vistas al jardín.
La ubicación de esta casa es otro de sus grandes atractivos. Situada en una tranquila calle del casco antiguo, está a solo unos minutos a pie de la iglesia de Sant Julià y del castillo, en un entorno que combina historia, naturaleza y tranquilidad. Además, Corçà se encuentra a solo 6 minutos en coche de La Bisbal, 25 minutos de Girona, y a menos de una hora de las playas de la Costa Brava, lo que la convierte en un punto ideal para disfrutar de la región.
En resumen, esta propiedad es una joya para aquellos que buscan un proyecto de rehabilitación en una de las zonas más encantadoras del Baix Empordà. Con una reforma bien pensada, esta casa de piedra puede convertirse en una propiedad única, llena de carácter y confort en un entorno inmejorable.