Situada a poca distancia de la cala de Sa Tuna, esta casa adosada ofrece luz natural, terrazas soleadas, jardín privado y agradables vistas al mar, en una comunidad tranquila con piscina y zonas verdes.
A tan solo 10 minutos a pie de la cala de Sa Tuna, esta luminosa casa adosada ofrece una experiencia única en uno de los rincones más tranquilos de la Costa Brava. Situada en una comunidad privada con piscina y jardín comunitarios, la propiedad combina privacidad, amplitud y vistas abiertas al mar y al paisaje natural que la rodea.
La vivienda, de aproximadamente 180 m² construidos, se distribuye en tres niveles conectados por una escalera interior:
- En la planta superior se encuentra la entrada principal desde la calle y un garaje cerrado de 24 m², además de una amplia terraza soleada con vistas al mar.
- La planta intermedia alberga la zona de día: un salón-comedor de casi 40 m² con grandes ventanales y salida a tres balcones-terraza que aportan mucha luz natural y enmarcan vistas al mar y al entorno boscoso. Esta planta cuenta también con una cocina independiente, un dormitorio individual y un baño con ducha.
- En la planta baja se sitúa la zona de noche, con tres dormitorios dobles, todos con salida directa al jardín privado. Uno de ellos dispone de baño en suite, y los otros dos comparten un segundo baño completo. Desde esta planta se accede al jardín privado, con zona de estar exterior y vegetación perimetral.
La casa disfruta de varios espacios exteriores que permiten vivir en contacto con la naturaleza durante todo el año: jardín privado, terrazas soleadas y balcones con vistas abiertas. La comunidad ofrece también un jardín comunitario muy bien cuidado y una piscina desbordante con vistas al mar, perfecta para relajarse en verano.
Gracias a su orientación sur-este, la vivienda goza de una excelente luminosidad durante todo el día. Desde prácticamente todas las estancias se disfrutan vistas abiertas al mar, al verde de los pinares y a las montañas que envuelven la zona. El estado general es muy bueno, con acabados actuales, carpintería de aluminio con doble acristalamiento, climatización por conductos y armarios empotrados.
Situada en una zona residencial tranquila, la casa se encuentra a solo unos minutos a pie de la cala de Sa Tuna y muy cerca de otras playas como Aiguafreda o Sa Riera. El centro de Begur, con todos los servicios y comercios, está a menos de 10 minutos en coche.