Ubicada en una de las zonas más exclusivas de Begur, esta elegante casa adosada ofrece una combinación perfecta de tranquilidad, naturaleza y vistas privilegiadas al mar. Situada a solo 15 minutos a pie de la cala de Aiguafreda y del camino de ronda, la vivienda se encuentra en un entorno residencial rodeado de bosque mediterráneo y a escasa distancia de las calas de Sa Tuna y Sa Riera.
El gran atractivo de esta propiedad es su amplia terraza privada de más de 85 m² orientada al sureste, desde la que se disfruta de una panorámica abierta al mar, al perfil rocoso de la costa y al entorno natural que caracteriza esta parte de la Costa Brava. Este espacio exterior permite crear distintas zonas de relax y comedor al aire libre, en contacto directo con el paisaje. La propiedad cuenta también con un patio posterior de 26 m² y acceso a un amplio garaje privado a nivel de calle, además de trastero.
Con una superficie construida de 162 m², la casa se desarrolla en una sola planta, con estancias bien definidas y funcionales. La zona de día está formada por un salón comedor con grandes ventanales y salida directa a la terraza, y una cocina abierta totalmente equipada con encimera de inducción, horno, horno microondas, frigorífico y lavaplatos. La zona de noche incluye tres dormitorios dobles, dos de ellos con cuarto de baño en suite, más otro cuarto de baño adicional. La distribución permite una vida cómoda tanto para residencia habitual como para segunda residencia familiar.
Construida en 1985 y completamente rehabilitada en 2023, esta vivienda combina un estilo contemporáneo con acabados de inspiración mediterránea. Dispone de ventiladores de techo, ventanas de aluminio con doble acristalamiento, armarios empotrados y suelos de gres cerámico y toba catalana, que aportan carácter y frescura. El garaje cerrado, con acceso directo desde la calle, ofrece un espacio práctico tanto para aparcamiento como para almacenamiento. Los muebles no están incluidos en la venta.
Desde la vivienda se puede llegar caminando en pocos minutos a la cala de Aiguafreda (1 km), una pequeña cala situada en la vertiente oriental de Begur, rodeada de acantilados y pinares. Su embarcadero tradicional y sus aguas tranquilas la convierten en un lugar perfecto para nadar, hacer snorkel o simplemente relajarse al sol en un entorno natural y poco concurrido. En menos de 10 minutos en coche se accede también a las playas de Sa Tuna (2 km) y Sa Riera (3 km). El centro de Begur está a solo 10 minutos (5 km), Palafrugell a 18 minutos (12 km), Girona a una hora (65 km) y Barcelona a 1 hora y 30 minutos (127 km). La frontera con Francia se encuentra a 1 hora y 15 minutos (87 km). Una opción ideal para quienes buscan vistas al mar, privacidad y una vida en contacto con la naturaleza.