Autenticidad, privacidad y carácter histórico en una finca única con torre medieval, 46.000 m² de terreno y múltiples viviendas en una de las zonas más exclusivas del Empordà.
En el corazón del Empordà, a pocos minutos de las playas más emblemáticas de la Costa Brava, se encuentra esta finca única con una superficie construida total de aproximadamente 1.200 m² sobre un terreno de más de 46.000 m². El conjunto combina patrimonio histórico, privacidad y elegancia atemporal. Dentro de la propiedad se alza la Torre Simona, una torre de defensa de los siglos XIV-XV perfectamente conservada, declarada Bien Cultural de Interés Nacional. Su presencia otorga carácter e identidad a esta propiedad exclusiva, ideal para quienes valoran el equilibrio entre historia y confort contemporáneo.
La finca se extiende sobre un terreno llano, completamente ajardinado, con amplias zonas de césped, árboles centenarios y rincones de descanso en plena naturaleza. Dispone de una gran piscina rodeada de vegetación, junto a la cual se ubica una encantadora pool-house, equipada como alojamiento independiente, perfecta para invitados o como zona de ocio. La casa de guardas, con entrada separada, ofrece funcionalidad y privacidad adicional dentro del conjunto. Todo el perímetro transmite una sensación de paz, amplitud y desconexión, en un entorno seguro y exclusivo.
La casa principal ofrece 508 m² de superficie útil interior, distribuidos en su mayor parte en planta baja, lo que facilita una vida cómoda y funcional. Destaca el impresionante salón principal de doble altura, con techos con vigas de madera, chimenea de piedra y grandes ventanales que comunican con el exterior. Un altillo abierto al salón, con barandilla de hierro forjado, ofrece un espacio polivalente para lectura o despacho. El comedor conecta con un porche cubierto ideal para comidas al aire libre, y la propiedad cuenta con dos cocinas: una moderna con mobiliario blanco y toques verdes, y otra profesional equipada con fogones de gas y campana industrial. La vivienda dispone de seis dormitorios, incluido uno tipo suite con vestidor, varios baños y dos oficinas independientes.
Cada rincón de esta residencia ha sido concebido con atención al detalle: suelos de madera, carpintería tradicional, numerosos armarios empotrados (hasta 17), lavadero, despensa y múltiples estancias auxiliares completan una distribución generosa. La construcción combina estética rústica con el confort moderno, en un equilibrio perfecto para disfrutar durante todo el año.
Mont-ràs ofrece una situación privilegiada, con fácil acceso a las playas de Calella, Llafranc, Tamariu o Aiguablava, todas a menos de 10 minutos en coche. Palafrugell, con todos los servicios, está a solo 5 minutos, y Girona o Barcelona se encuentran a 45 y 90 minutos respectivamente. Esta propiedad reúne todos los atributos de una gran finca: historia, extensión, privacidad, múltiples edificaciones y un entorno natural de gran belleza. Una oportunidad excepcional en el mercado inmobiliario de la Costa Brava.