Con una superficie construida de 314 m² sobre una parcela de 818 m², esta vivienda ofrece una distribución cómoda y versátil en tres plantas, ideal para quienes valoran tanto la vida interior como los espacios al aire libre. La propiedad se encuentra en una tranquila zona residencial, bien conectada con el centro urbano y las playas.
El exterior destaca por su jardín de bajo mantenimiento, con seto perimetral que garantiza privacidad. La piscina privada de cloración salina se complementa con una amplia zona de solárium y una práctica zona de barbacoa. El porche cubierto, que funciona como terraza principal, comunica directamente con la piscina y es accesible tanto desde el salón-comedor como desde la cocina. Se presenta como un espacio ideal para comer al aire libre, disfrutando de la orientación sur.
La planta principal alberga un luminoso salón-comedor con chimenea, equipado con aire acondicionado y acceso directo al porche y a una terraza con vistas sobre la piscina. La cocina independiente, con zona office y salida a la misma terraza, resulta funcional y bien equipada. En esta planta se encuentran también tres dormitorios dobles, uno de ellos actualmente utilizado como despacho. Uno de los dormitorios dispone de baño privado, mientras que los otros dos comparten un segundo baño completo, uno con ducha y otro con bañera.
En la planta superior se sitúa una amplia suite, que incluye un dormitorio con armarios, vestidor, baño completo y acceso a una terraza-solárium privada con vistas despejadas al entorno natural y al perfil urbano de Sant Antoni.
El nivel inferior dispone de una gran sala de estilo bodega, perfecta para celebraciones o actividades familiares. Incluye además una cocina secundaria, una estancia polivalente, zona de lavadero y garaje.
La vivienda cuenta con calefacción por radiadores con caldera de gas natural, aire acondicionado tipo split en el salón-comedor y en la suite principal, ventanas de PVC con doble acristalamiento y rejas en planta baja. Dispone de garaje cerrado para dos vehículos con puerta automática y dos plazas exteriores cubiertas por celosía.
Situada a solo 1,4 km de la playa de Sant Antoni, la propiedad goza de una localización práctica, a pocos minutos de Palamós, Platja d’Aro y otras calas de la Costa Brava, así como bien conectada con Girona y Barcelona.
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